La importancia de una cultura empática y participativa a nivel organizacional

Por: Iván Hernández, IMT

Para que una organización sea realmente exitosa, sostenible y rentable, debe contar con un equipo de trabajo resiliente y comprometido, por ello, es indispensable tener en cuenta valores como el respeto y la motivación, de esta forma será posible ver reflejado el desempeño y la productividad del colaborador en un mejor entorno social y sobre todo laboral.

Mostrar empatía en el lugar de trabajo demuestra un gran respeto por los demás y contribuye a desarrollar un mejor ambiente laboral y cultura de equipo. Además, aumenta la autoestima y permite que tanto directivos como colaboradores se sientan tomados en cuenta.

Un reciente ebook, realizado por Udemy, titulado Manager Essentials: Leading with Empathy, destaca que la empatía desarrollada en los espacios de trabajo trae muchos beneficios relacionados con la innovación, el compromiso, la inclusión, la reducción del agotamiento y el crecimiento de los trabajadores.

Es importante poder desarrollar esta habilidad y compartir la intención de crear una identidad organizacional para formar una cultura en pro del bienestar del colaborador. Bajo este contexto, mostraremos a continuación algunos puntos recomendados por Udemy para lograr ser más empáticos en materia laboral:

1) Conectar con nosotros mismos. A veces, la carga excesiva de trabajo o en general, el ritmo de vida que llevamos, nos alejan de nuestra salud mental y emocional y, si no nos conectamos con nosotros mismos y aprendemos a observarnos, difícilmente le podremos dar ese apoyo a otras personas.

Por eso, la recomendación para liderar con empatía es detenernos un momento y preguntarnos cómo nos sentimos emocionalmente y, hacer de esto un hábito. En la medida en que desarrollemos esta capacidad de estar conscientes de nuestras propias emociones, será más sencillo reconocer y lidiar con las de los demás.

2) Aprender a escuchar. Sentirse escuchado es una de las cosas más reconfortantes que puede recibir una persona, por ello, más que dar consejos o soluciones, lo importante es aprender a escuchar a esa persona que lo necesita, independientemente si es parte de tu equipo de trabajo o no.

Cuando se escucha, es posible conectarse con las personas a un nivel más profundo, porque comenzamos a entender sus razones y la forma en que se sienten con respecto a distintas situaciones en sus diferentes entornos.

3) Usar el lenguaje adecuado. Cuando se quiere comunicar con empatía, el lenguaje que se utiliza es muy importante. Escuchar antes de hablar nos da la ventaja de reflexionar sobre lo que nos están planteando, de esta forma podremos procesar la información, darle el sentido correcto y no llegar a conclusiones equivocadas.

Estos son tan solo algunos consejos para convivir y liderar con empatía, sin embargo, es posible encontrar otras formas de conseguirlo, ya que esta cualidad puede ser desarrollada de múltiples maneras considerando que todas las personas y sus circunstancias son diferentes. Trabajar para convertirse en un colaborador y líder empático es igual de importante que ser participativo, resiliente, comunicativo y poder desarrollar diferentes habilidades en pro de la empresa para la que se trabaja; generar confianza sin duda fomenta un ambiente de trabajo positivo y con mejores resultados.