Evolución y adopción de la nube en las organizaciones a través del tiempo

Por: Iván Hernández, IMT

En esta nueva era digital, la nube ha emergido como una fuerza transformadora en la gestión de los recursos tecnológicos de las empresas. Desde sus orígenes hasta su estado actual, el entorno cloud ha experimentado un desarrollo notable, revolucionando la forma en que las organizaciones gestionan sus activos digitales, mejoran su eficiencia y ahorran costos operativos, lo cual lo ha llevado a pronosticar según la consultora IDC que, al cierre de este año, el cloud computing crecerá un 30.4% en Latinoamérica.

El concepto de “nube” tiene sus raíces en la década de 1960, cuando los primeros esbozos de redes de computadoras comenzaron a surgir. Sin embargo, fue en la década de 1990 cuando el entorno cloud empezó a tomar forma con la aparición de los primeros servicios de almacenamiento remoto y compartido. Estos servicios permitían a las empresas alojar y acceder a sus datos y aplicaciones de forma centralizada, eliminando la necesidad de infraestructuras físicas costosas y complejas.

“El entorno cloud ha trascendido las fronteras de la innovación, transformando radicalmente la forma en que las empresas operan en la actualidad; con capacidades cada vez más avanzadas, las organizaciones ahora pueden aprovechar la potencia de la nube para optimizar su eficiencia operativa, impulsar la productividad y desbloquear un potencial ilimitado de crecimiento. Este progreso tecnológico no solo beneficia a las empresas, sino también a la sociedad en su conjunto, al fomentar la colaboración global, acelerar la investigación y facilitar el acceso a servicios y soluciones de vanguardia", manifestó Arturo Sánchez, Director Comercial de Noventiq México.

Los beneficios de la nube para las empresas son innegables. La flexibilidad y escalabilidad que ofrece permiten a las organizaciones aumentar o reducir su capacidad según la demanda, lo que se traduce en una mayor eficiencia y ahorro de costos. Además, la adopción del cloud computing proporciona a las empresas acceso a tecnologías de vanguardia, como el análisis de datos avanzado, el aprendizaje automático y la Inteligencia Artificial, que antes solo estaban al alcance de las grandes corporaciones.

No obstante, junto con los beneficios también surgen desafíos. La seguridad de los datos y la privacidad son preocupaciones cruciales para las empresas que migran al entorno cloud. Por esto, a medida que las amenazas cibernéticas continúan evolucionando, las organizaciones deben implementar medidas sólidas de protección y cumplir con los estándares de seguridad para salvaguardar su información confidencial.

“El cloud computing ha democratizado la tecnología empresarial, desmontando la idea de que solo las grandes empresas pueden disfrutar de sus beneficios. Ahora, las pymes tienen la oportunidad de cerrar la brecha tecnológica que las separaba, gracias a la accesibilidad y flexibilidad de la nube. Este modelo nivelador posiciona a todas las organizaciones en un terreno de juego equitativo, permitiéndoles aprovechar al máximo sus ventajas para potenciar su crecimiento y mejorar su eficiencia", concluyó Sánchez.