Coworking: la oficina del futuro
Por: César Julián Cely, Director de Mercadeo y Producto en Unify México
Tomar la decisión de emprender o realizar un trabajo de manera individual tiene muchos beneficios, entre los que destacan la independencia y autogestión, sin embargo, también implica la necesidad de fijarse una rutina, encontrar un espacio idóneo y adecuar las herramientas necesarias para operar: computadora, teléfono, software, etc., ante lo que surge la duda de ¿cómo solventar los gastos de un espacio y el equipo necesario para trabajar? La respuesta es: el coworking.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM) y el sitio coworker.com, actualmente en México operan alrededor de 74 espacios de coworking, de los cuales 32 se encuentran en la Ciudad de México, siete en Monterrey, siete en Guadalajara y los restantes se distribuyen en algunas entidades del Bajío y Sureste del país.
Crece, reduce costos y comparte
México es el sexto mercado en desarrollo o emergente más importante en cuanto al crecimiento de espacios de coworking se refiere, al superar a países como Francia e Italia, pero por debajo de Brasil e India, de acuerdo con un estudio realizado por la consultora internacional HOK.
El crecimiento de estos espacios laborales en nuestro país se debe a que los emprendedores y profesionales independientes encuentran gran utilidad en el coworking, ya que pueden recurrir a sus espacios de forma diaria o cuando lo requieran, permitiéndoles tener una oficina on demand y equipada con todo lo necesario para ser productivos, al ofrecer entre otras herramientas:
- Conectividad para hacer uso de diversos dispositivos como smartphones, portátiles, impresoras, etc.
- Espacios de trabajo adecuados a sus necesidades, organizados y cómodos.
- Disponibilidad de horarios, tarifas atractivas y salas de juntas.
Con estas facilidades, también existen empresas ya establecidas en oficinas propias que prefieren mudar parte de sus operaciones a espacios de coworking, pues les permiten a sus colaboradores desempeñar sus tareas sin necesidad de realizar largos traslados, teniendo las mismas comodidades que en las oficinas principales de una marca, lo que ayuda también en la atracción de nuevos talentos al distinguir a las empresas por ofrecer espacios de trabajo flexibles y un ambiente agradable.
Acceder a un espacio en un centro de coworking no es complicado, sólo se requiere pagar una tarifa mensual o específica de acuerdo a los recursos que se soliciten. En el caso de México la mensualidad que se cobra por persona va de 15 a 200 dólares (o su equivalente en pesos), dependiendo de las amenidades que busque el inquilino.
El secreto del éxito: colaboración
Una de las principales ventajas del coworking, al compartir el lugar con personas que desempeñan diversas tareas, es la afluencia de ideas y profesiones en un mismo espacio, lo cual se convierte en una ventaja que mejora la productividad mediante el aprendizaje de nuevas habilidades, permitiendo incluso el surgimiento de nuevos proyectos conjuntos.
No obstante, la tecnología que se emplea para mantener la comunicación en un espacio de coworking también es importante, pues se deben ofrecer espacios virtuales que faciliten el trabajo móvil, lo cual se puede lograr mediante la plataforma Circuit.
El coworking puede generar mayores ventajas para aquellos que deciden operar de manera independiente, emprender su propio negocio e incluso para las compañías que se dan la oportunidad de utilizar esta modalidad de trabajo para ofrecer a sus colaboradores una forma de trabajo remota como posibilidad adicional.
Este es sólo un ejemplo más de cómo la tecnología facilita la generación de conexiones y permite el surgimiento de nuevas modalidades de trabajo, que además de interesantes resultan productivas para explotar el trabajo colaborativo y móvil.