Black Friday: seguridad digital para garantizar el éxito en las ventas

Por Gina Van Dijk, Directora Regional de (ISC)² América Latina

Todos los años el tema se repite: basta el Black Friday aproximarse para que surja una avalancha de publicaciones dando consejos sobre cómo aprovechar las ofertas con seguridad. Sin embargo, esta preocupación no debe formar parte solo de la rutina de los clientes. En plena Era Digital, con el e-commerce creciendo cada vez más, es vital que las empresas piensen en políticas de ciberseguridad específicas para proteger sus estructuras y a sus consumidores en este importante período de ventas.

Se trata de una fecha que despierta el interés de los consumidores y, por eso, merece una atención especial. Para aprovechar las oportunidades y aumentar los ingresos, se recomienda que las empresas elaboren planes que alineen las peculiaridades generales del período con las demandas específicas de los negocios.

Un primer paso es ponderar que el probable pico de operación causará diversos efectos en las áreas que cuidan de la gestión de la información, de la creación y organización de stock, procesos de producción, comunicación, gestión de pagos y de la recepción y emisión de documentos. Es decir, hay una infinidad de tareas y datos que necesitan ser correctamente coordinados y protegidos, en un mundo conectado y visto en tiempo real.

Estar preparado en todos estos frentes evidentemente requiere mucha planificación y enfoque. Por eso, lo más importante para crear ambientes seguros en períodos como el Black Friday es no dejar para última hora qué medidas necesarias se deben tomar. La planificación de los negocios necesita ir acompañada de las estrategias que garanticen la eficiencia, la conformidad y la seguridad de las operaciones.

Vale decir que esta preparación exige un cambio de actitud permanente, no solo durante los meses o semanas que anteceden a períodos como el Black Friday. Para garantizar la seguridad de la información, se recomienda que las empresas dediquen una atención especial al tema, mejoren sus reglas internas y, principalmente, capaciten a sus profesionales con cursos y certificaciones que los ayuden a proteger sus ambientes digitales.

Las cifras alertan sobre las vulnerabilidades del mercado. De acuerdo con el estudio global de (ISC)², el 59% de las empresas considera que están en riesgo moderado o extremo de ataques virtuales. La mayoría de las empresas todavía está en busca de maneras para mitigar los riesgos durante sus operaciones más triviales.

Es necesario que las organizaciones formen equipos capacitados con profesionales multidisciplinarios y preparados para antever los riesgos digitales y proponer soluciones y ajustes que mitiguen eventuales amenazas. Con la ayuda de especialistas en seguridad, la empresa será capaz de proteger mejor su estructura, implantando prácticas de prevención que ayuden a disminuir sus riesgos.

Se recomienda, asimismo, que las empresas verifiquen si las reglas de seguridad han sido actualizadas y que todos sus profesionales estén conscientes de las amenazas digitales, así como de los procedimientos a seguir en caso de ciberataques, ya que las amenazas virtuales se alteran en una velocidad frenética. Todos los días surgen nuevas modalidades de fraudes y de ataques. Las empresas deben utilizar sus mejores talentos para proteger sus sistemas y su información, trabajando para actuar rápidamente frente a amenazas de este tipo.

Las épocas de altas ventas, como Black Friday, Día de la Madre y Navidad, requieren tiempo y capacitación de los equipos. Es importante que esta preparación se realice de forma continua, buscando siempre certificaciones del mercado que avalen la calidad de los servicios y de la estructura disponible. El éxito de las ventas no depende solo de estrategias comerciales agresivas, sino también de ambientes confiables. Por todo esto, se puede afirmar que la seguridad de datos no es más una cuestión departamental y sí un componente fundamental para garantizar la tranquilidad de los clientes y proteger la reputación de su marca.