6 desafíos de TI en una economía incierta

Por: Patricia Fuentes, Country Manager, Quest Software México

Las organizaciones llevan varios años en un viaje de transformación digital acelerado. Todas las nuevas inversiones en TI surgieron de necesidades de negocio. Sin embargo, cuando la situación económica es incierta, los presupuestos se revisan y recortan, y como resultado, las inversiones en TI deben reenfocarse. El problema actual para cualquier organización es descubrir cómo priorizar, mientras se logran objetivos e iniciativas.

La mayoría de los proyectos de TI se financian por tres razones clave: generar ingresos, permitir el ahorro de costos y reducir el riesgo.

Con eso en mente, estos son los desafíos más comunes que hemos visualizado en Quest Software que actualmente enfrentan las organizaciones:

1) Entornos de TI que cambian rápidamente: Las políticas de trabajo han cambiado drásticamente. Antes, las arquitecturas de TI solían depender de que todos estuvieran en la oficina con un pequeño porcentaje de casos de uso para BYOD. Ahora el trabajo remoto se ha convertido en la norma y las metodologías de TI se han visto obligadas a evolucionar con implicaciones significativas en torno a la gestión de sistemas, la topografía y la arquitectura de las redes.

2) El dilema de los datos: Las organizaciones están experimentando una avalancha de datos que provienen de múltiples fuentes. Además, pueden estar incompletos, difíciles de acceder, aislados por departamento o equipo, y pueden representar un verdadero desafío para aprovecharlos de forma valiosa.

Gartner y varios otros analistas predicen que el 50% de los empleados y las líneas de negocios serán desarrolladores de tecnología en 2023 y ya no serán solo consumidores de tecnología. También anticipan que el 75% de las organizaciones implementarán múltiples centros de datos para impulsar información y analíticos de misión crítica. Estos datos necesitan ser protegidos, administrados, almacenados, etc. Las organizaciones que no dan prioridad a la modernización o no adoptan un enfoque proactivo hacia el gobierno de datos tendrán dificultades para aprovechar los conocimientos y, como resultado, tendrán dificultades para crecer en sus negocios.

3) Escasez de talento:
Los entornos de TI que cambian rápidamente requieren de profesionales especializados. Las congelaciones de contratación, los procesos extendidos y las ofertas competitivas de otras empresas hacen que sea increíblemente desafiante cubrir los puestos existentes o llenar los nuevos. Si se tiene talento como parte del equipo de trabajo actual, es beneficioso implementar políticas de retención eficaces.

4) Complejidad de herramientas y proveedores: Con un nuevo reto de TI, surge un nuevo ecosistema de herramientas que se ha desarrollado para resolverlo. La forma más eficiente de enfoque para los departamentos de TI es buscar soluciones que les permitan aprovechar las tecnologías existentes que también pueden funcionar en el entorno operativo futuro y, en base a las iniciativas de transformación digital, como migrar a la nube, por ejemplo.

5) Altos costos de las licencias: Los costos de las licencias están afectando los presupuestos de todas las empresas. Si bien todos comprenden la agilidad que pueden ofrecer los servicios basados en la nube, lamentablemente a menudo conlleva un costo que muchas empresas no pueden absorber.

6) Recuperación ante desastres: La forma más fácil de comenzar es desarrollar un mapa de riesgo de TI y analizar algunas de las preguntas clave. ¿Cuáles son las consecuencias de que ocurra un evento adverso?, ¿Qué tan probable o improbable es que suceda? La tolerancia al riesgo de cada organización es diferente. Si es poco probable que suceda un evento o si solo tendrá un impacto menor, una empresa puede optar activamente por abordar el problema solo después de que se hayan solucionado los asuntos más importantes y urgentes.

Las organizaciones en un viaje de transformación digital continuarán descubriendo cómo lograr sus objetivos a pesar de las dificultades económicas y las prioridades cambiantes. Evaluar el riesgo de TI y analizar el contexto de los desafíos que tiene una organización, ofrece la oportunidad de priorizar los proyectos necesarios para mantener la resiliencia y la continuidad del negocio.