Cultura organizacional: trabajo híbrido, atracción y retención de talento

Por: Iván Hernández, IMT 

A medida que se transforman las nuevas formas de hacer negocio, las organizaciones también cuentan con la oportunidad para reinventar la manera de laborar sin la necesidad de establecer un lugar fijo donde poder hacerlo y, al mismo tiempo, estar mejor preparados ante los desafíos actuales de crecimiento, sin dejar de lado la estabilidad, confianza, autonomía y seguridad que brinda este modelo al ejercerlo desde cualquier lugar.

El trabajo híbrido resulta ideal para combinar los beneficios de llevar a cabo actividades desde casa con los espacios de interacción en las oficinas, responsabilizándose de su entorno de acuerdo con las necesidades y objetivos del colaborador. Contar con este nuevo modelo y con un horario flexible, significa brindar al trabajador la posibilidad de adaptar sus horarios laborales a su ritmo de vida, obteniendo mayores tasas de productividad y transformación digital.

Este esquema prácticamente surgió a raíz de la pandemia, se mantiene en constante evolución y ha dado resultados muy favorables en materia de productividad; al mismo tiempo, se automatizaron procesos y se ha capacitado a los empleados para enfrentar nuevos roles acompañados del uso de la tecnología, con el objetivo de entender las necesidades del cliente o usuario final.

Otro aspecto vital en el que las organizaciones deben invertir para mantenerse en un mercado más competitivo es la formación y retención de sus colaboradores. En ocasiones, la dificultad para encontrar profesionales que se adecuen, muestren resiliencia y sean capaces de aportar a la industria, inhibe la adopción de diversos dominios que se necesitan para una total funcionalidad y progreso de cualquier empresa.

Y es que quizá la estrategia más importante para que las empresas logren salir triunfantes en esta batalla por el talento humano es ofrecer engagement laboral. Este concepto tiene que ver con el sentimiento de formar parte de algo, generar lazos e identificación con los valores de la empresa y, con el apoyo de la organización, fomentar un sentido de pertenencia e inclusión para interactuar bajo un mejor ambiente laboral.

El compromiso de los trabajadores resulta indispensable para el éxito de cualquier empresa, la observan en conjunto y comprenden su propósito; esto conduce a un mejor rendimiento y toma de decisiones. Con una estrategia eficaz de participación de los empleados y una fuerza laboral altamente comprometida y responsable, las organizaciones tienen más probabilidades de retener a los mejores y atraer nuevos talentos.

Podemos concluir que la combinación del trabajo remoto y presencial, así como el engagement se contagia entre los miembros del equipo a través de su experiencia, generando un compromiso colectivo en donde el entusiasmo, la dedicación al trabajo y las emociones positivas son sus principales detonantes.